viernes, 30 de septiembre de 2016

La solidaridad con la República española, desde Francia, Bélgica, Suiza, Inglaterra, Uruguay, URSS, Méjico...

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HAGAMOS DE LA MEMORIA ANTIFASCISTA UN PRESENTE DE LUCHA Y RESISTENCIA

Seguimos dando a conocer testimonios del apoyo y la solidaridad que de los trabajadores de todo el mundo prestaron a los antifascistas en España. Son tantos y tantos los testimonios desde todos los continentes que por motivo de espacio solo recogemos algunas muestras significativas de este grandioso movimiento de solidaridad.

Foto, manifestación en Uruguay en apoyo a la República española
Nosotros somos la solidaridad

Para conocer el verdadero espíritu de los pueblos no hay circunstancia más propicia que la que se da en las represiones de los Gobiernos tiránicos contra las masas populares o en una guerra de las características de la nuestra.
El movimiento de solidaridad bien organizado, es la fuerza más potente y eficaz que puede existir como instrumento de ayuda o una causa justa y popular.
Ya en octubre del 34, (…) tuvimos una prueba magnifica y grandiosa de lo que es y significa la solidaridad.
¿Qué hubiera sido de los centenares y millares de emigrados por aquella represión brutal, si no hubieran encontrado países como la Unión soviética, Francia, Méjico, etc., que les acogieron como hermanos y les ofrecieron el calor y el pan de sus hogares?
Hoy, en una prueba mucho más dura y cruel, volvemos a experimentar en toda su grandiosidad cual es el espíritu de sacrificio y admiración que para nosotros tienen los antifascistas de todos los países.
Las Brigadas Internacionales, formadas por trabajadores que dejaron sus hogares unos, y otros perseguidos por el fascismo en sus respectivos países, vinieron a unirse al pueblo español, en una comunión de sangre y sentimiento.
La Unión Soviética y Méjico, acogiendo a nuestros hijos y enviándonos alimentos y ropas para hacer frente a elementales necesidades. Los trabajadores de todos los países, elevando ante la conciencia de los sordos y los mudos un clamor de protesta universal.
Los Comités de Ayuda al pueblo español en su lucha centuplican sus esfuerzos para, con un trabajo extraordinario, colaborar materialmente a esta guerra internacional por la independencia del mundo.
Los obreros norteamericanos, declarando el “boicot” a los productos alemanes e italianos….
Actos y manifestaciones públicas de protesta en Francia, Inglaterra, etc. Los obreros alemanes, organizando en la ilegalidad su trabajo antifascista…
Los obreros ingleses, negándose a cargar materiales para los rebeldes…
El mundo entero, puesto en pie, amenaza con terminar la tiranía de los Hitler y Mussolini, carniceros y verdugos de los oprimidos….
Es la voz de la solidaridad que se oye potente y enérgica en todos los rincones de la tierra.
Es sencillamente que la conciencia universal se ha dado cuenta de que en España se ventila el porvenir de las democracias. El dilema de una oscuridad donde los hombres no serán hombres, o de una luz que alumbrará potente y magnifica un futuro de libertad, trabajo y paz.
La solidaridad de los pueblos está tan viva como la llaga dolorosa que es hoy España, y mientras exista la solidaridad de unos pueblos con otros y existan también hombres oprimidos y perseguidos, el Socorro Rojo Internacional, auxilio y ayuda de todos los necesitados, vivirá potente y enérgico, con la autoridad plena y la confianza de todas las conciencias rectas y justas.
Hoy más nunca y siempre, el Socorro Rojo Internacional cumplirá su trabajo, lleno de sacrificios y sinsabores”.

F. Bolea. Ayuda nº 51, 18/04/1937


Foto mitin en París. La pancarta dice: "Los obreros de Gnome y Rhone, ofrecemos un avión a los republicanos españoles. ¡Recolectad para armar a los defensores de la Libertad y la Paz!".
Mitin monstruo en París
 
La heroica lucha que están librando los antifascistas españoles por la defensa de su libertad, ha encontrado un gran eco entre los trabajadores y personas de sentimientos democráticos de todos los países.
En Francia, la epopeya española tiene pendiente, cada día y cada hora, a la opinión. Mítines de adhesión a nuestros luchadores, demostraciones de simpatía en los pueblos y ciudades más importantes, páginas enteras de los periódicos y colectas en los lugares de trabajo atestiguan la simpatía y el cariño con el pueblo francés acoge todo lo que signifique defensa de la democracia y lucha contra el fascismo, el enemigo más encarnizado de la libertad y de la paz en el mundo entero.
Pero la más alta demostración de solidaridad ha tenido efecto el 25 de agosto en el Stadium Buffalo, de París, donde 50.000 antifascistas han escuchado la palabra de los dirigentes del Frente Popular francés… En todos los lugares declaraciones de simpatía hacia España y, dominándolo todo, un solo grito gigante emitidos por cincuenta mil gargantas. “Des avions pour l’Espagne”, “Des avions pour l’Espagne”.
En el centro del campo de deportes un magnifico avión de los dos que se regalarán a España por suscripción popular, con las banderas francesa y de nuestro país en un solo haz. En los cables de los altavoces, por todos los lugares innumerables banderas simbolizando la hermandad del Frente Popular español y francés.
(…)
Todos los oradores se expresaron en términos cordiales para el pueblo español y de apoyo a sus heroicos combatientes. El peligro común fue señalado certeramente por Thorez: “La victoria del fascismo en España significaría un peligro para la paz de Europa y para las democracias”. Sus últimas palabras fueron acogidas con enormes ovaciones: “Luchemos por la causa de la República española, que es nuestra propia causa. Luchemos por la paz con honor y con dignidad”.
André Chamson cerró el grandioso mitin dando lectura a una resolución que fue aprobada unánimemente. He aquí su texto: “Las decenas de millares de hombres y mujeres reunidos en Buffalo, el 25 de agosto de 1936, dirigen a los republicanos españoles los más calurosos saludos y les aseguran su más firme voluntad de lucha contra el bloqueo impuesto al Gobierno republicano.
Protestamos enérgicamente contra las palabras de amenaza lanzadas por los odiosos fascistas contra Francia y contra la paz. En presencia de tales amenazas, llamamos a los franceses a unirse por la defensa de sus libertades, por la independencia de nuestro país, por la paz del mundo y contra los enemigos del pueblo español”.

Esteban Vega. Ayuda nº 16, 5/9/1936
Foto mineros en Bélgica. Manifestación recogiendo fondos para enviar a España.
Suiza: “Sangre para los combatientes españoles

Leemos en un periódico extranjero una interviú con el doctor Jaegdy, de Lausana, del Comité internacional de ayuda médica a los republicanos españoles que ha abierto clínicas para los donantes de sangre en Lausana, Ginebra, Zurich y Berna, en las que se inscriben centenares de donantes voluntarios, declarados previamente aptos en el examen médico.
Declaró que los donantes de sangre era fáciles de hallar. “Tenemos cientos de ellos –dijo-, en su mayoría vigorosos obreros, que se presentan al examen ansiosos de ser elegidos para las primeras pruebas, pues quieren ayudar a los republicanos”.
Los donantes dicen, “que ya que con la no injerencia y el enérgico control es imposible ir a combatir como voluntarios, darán su sangre por los republicanos, aunque no sea en el campo de batalla”. Ellos entienden así su admirable solidaridad con el pueblo español que lucha también por su libertad”.

Ayuda nº 60, 20/06/1937


Setecientos intelectuales ingleses reclaman armas para la España republicana
John Goss, en nombre de 700 escritores, artistas y músicos ingleses célebres, acaban de dirigir a Chamberlain un llamamiento, a fin de que vuelva sobre su decisión de “rehusar al Gobierno legal de España el derecho de adquirir armas necesarias para la defensa de mujeres y niños”.
Míster Goss ha escrito, entre otras cosas, lo siguiente: “Nosotros consideramos que la masacre y terrorismo contra las poblaciones civiles cesarían cuando sea peligroso para los mismos que lo realizan. Armas defensivas, tales como cañones antiaéreos, pueden ser el mejor argumento que despertará la atención de aquellos que han hecho oídos sordos a las protestas del mundo civilizado”.

Bélgica: “La acción de ayuda a España, en Bélgica, es la más amplia que se conoce.
El proletariado belga está realizando una de sus más grandes y magnificas obras. Obra de solidaridad, de unión espiritual. La de la ayuda a la República española.
La acción se desarrolla, por sus resultados, por el calor, por el entusiasmo que en ella pone, es la más amplia que se conoce en la historia del movimiento obrero belga.
La lista número 101 de lo recaudado, da un total de 2.832.927 francos.
Después de esto –dice Block, en “Le Peuple”– ya no se puede dudar de que alcanzaremos la suma de tres millones, y tal vez se sobrepasen. Debemos reconocer, con toda lealtad –agrega-, que no creíamos conseguir tan de prisa esta cifra. Doscientos mil francos no se consiguen en un instante. Pero nos atenemos a los hechos. Solamente en dos días se han recaudado 250.000. Esto nos hace creer que conseguiremos completar rápidamente los tres millones.
La Federación de borinage nos ha enviado 68.542,55, Con esta cantidad el importe total de lo recaudado en esta región pasa de cien mil francos. Esta importante suma se ha reunido por medio de pequeñas donaciones.
Borinage ha realizado un hermoso trabajo. Para reunir franco por franco, una suma tal, no basta solo con el esfuerzo: es necesario también que todos los trabajadores y demócratas vivan intensamente los sucesos de España.
La Central de Mineros nos ha enviado 50.000 francos, cantidad acordada en el último Congreso Nacional. Los buscadores de oro negro permanecen fieles a su tradición. Allí donde haya que defender la libertad, la democracia, el derecho de liberación de los trabajadores, los mineros, solidariamente unidos, se encuentran en primera línea.
Todo esto nos hace creer que conseguiremos completar rápidamente, los tres millones.
Se sobrepasan, con mucho los tres millones
El mismo periódico –Le Peuple”- da cuenta de que se han rebasado los tres millones Lieja nos ha ayudado con eficacia. Ella ha hecho que de un solo golpe se rebasase con mucho la mencionada cifra.
Al lado de estos ejemplos hay otros menos importantes en cantidad, pero de una significación particular para el porvenir. Todos los obreros y empleados de Turhout, siguiendo el ejemplo de otras organizaciones han decidido establecer cotizaciones semanales. Grammont hace una tentativa para conseguir que se deje el importe de una hora de salario. Ostende ha organizado una suscripción para recoger fondos y así en muchas ciudades.
El movimiento obrero conquista un lugar de honor en la acción internacional de ayuda a España republicana. Si los fondos recogidos se calcularan por habitante o por miembros afiliados a los Sindicatos, Bélgica ostentaría, no uno de los primeros lugares sino el primero.
La acción de ayuda debe proseguir con más ardor y más entusiasmo que nunca. A medida que se alarga la guerra civil aumenta la seguridad del triunfo del Gobierno republicano y el heroísmo de los defensores de las libertades españolas. El pueblo padece sin protestas, porque los demócratas españoles saben que luchan por la libertad, la democracia y el derecho. Por lo tanto, nuestro deber es el de amortiguar todo lo posible su sufrimiento. Este fin se consigue llevando cada día más lejos la acción de ayuda.
La consigna de ahora debe ser: todos al trabajo para reunir, lo antes posible, el cuarto millón de francos”.

Ayuda nº 71, 4/09/1937

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