sábado, 4 de agosto de 2012

Se incrementa la solidaridad con l@s pres@s polític@s // Cartas de lector@s.

Cajita y agenda realizadas en prisión, para sostener el peculio de las y los presos políticos

Las pequeñas aportaciones



La denuncia de la situación de lxs presxs políticxs se multiplica, en foros, redes sociales y en la calle.


Y se están multiplicando los actos solidarios, la distribución de las denuncias en tabernas populares, centros sociales...


Y la creación de asambleas, plataformas, comités, iniciativas... en solidaridad con las y los presos políticos, y en localidades donde no los había desde finales de los 70.


Y mucha gente pide programas, info... sobre la solidaridad hacia los prisioneros políticos.


Y los actos de solidaridad económica, para ayudar a sufragar los gastos de peculio en las cárceles, de la dispersión penitenciaria, gastos judiciales...


Comidas populares, sorteos, loterías, mesas de materiales, puestos en eventos y aportaciones solidarias. (Si las aportaciones son por Correos, para evitar gastos usura, mandad el dinero camuflado a las direcciones de los Comités)

Cartas de lectores:



Efectivamente, eso de que hay días que valen por décadas se está haciendo realidad en el Estado, en una situación política que saca a la luz movimientos y descontento masivo, si bien (como no podÍa ser menos) desorganizado y con falta de claridad en sus objetivos. Y con esta dinámica, como los hongos en la basura, asoman grupos y grupillos desconocidos en estas plazas, con propuestas demagógicas que obvian lo esencial, la explotación del capital sobre el trabajo asalariado, con la intención cada día mas clara de echar capotes: culpabilizar a los "políticos", a este o aquel banquero, a los corruptos (a los excesivamente corruptos), a ese 1% de "ricos", como les llaman, con ese concepto tan mediático, tan bienintencionado, tan... antiobrero. La demagogia en períodos críticos nunca ha estado lejos del fascismo, de un populismo ferozmente reaccionario que tiene ahora y aquÍ, en este Estado, posibilidades. ¿Hay que recordar la participación, no inédita pero sí más visible estos días, de sindicatos de cuerpos policiales ferozmente represivos, sindicatos que avalan hoy mismo las torturas y la saña en la represión? ¿Hay que recordar la participación de asociaciones ultrareaccionarias de militares? Como siempre, pero más ahora que nunca, es preciso por parte de todos los revolucionarios la claridad y la denuncia. La cuestión es el socialismo; la situación a demoler, el modo de producción.
Paralelamente a esto, el Estado muestra su auténtica cara, abandona su apariencia benéfica y pasa a comportarse como lo que es, la máquina de guerra de la clase dominante. Por la parte que les toca, es de suponer que esa represión va a extenderse a todos los ámbitos, y la cárcel (y como muestra basta un abanico... republicano) puede ser un campo privilegiado para ese castigo, que puede parecer irracional, demente, como las cargas policiales en las calles de las ciudades sin motivo ni causa aparente, pero que no deben engañarnos. Viendo los vídeos del centro de Madrid es inevitable recordar los últimos años 70 y los años 80 en Euskadi: somos su enemigo.


Félix  

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